El morbo que se nutre del aburrimiento y la soledad.
Se me metió un gusano entre los dedos, justo donde nuestras manos son de pato, me picaba con sabor a viejo, con curiosidad sacaba su horrorosa cabeza, me hacía verlo el muy desgraciado, yo solo quería seguir caminando. Uno, dos, tres gusanos entre cada dedo, viejitos arrugados susurrándome cosas de futuros inexistentes como enseñádome retoños nuevos por binoculares, todos hermosos, todos ajenos, inalcanzables, con aromas que se veían dulces, aromas que nunca podré comprobar.
Y mis propios perfumes? porque no me enseñan frutos que nazcan de mi pecho? aunque estén lejos, pero que crezcan de mi.
Bah, el internet deja ver pasados desarrollados, te deja echar un vistazo a lo que pasó después de que Harry Potter fue vencido por Voldemort, después de que Van Helsing se convirtió en vampiro y traicionó a la humanidad, el fueron infelices para siempre, pero matizado como si todo hubiera salido bien.
A mi que más me da, ¿de qué me sirven tramas ajenas, planes artificiales, historias de libros que nunca podré leer, nada más contádome las partes felices?
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