Estoy leyendo Agua Viva de Clarice Lispector.
Entro en su cabeza y veo mis quince años, veo la historia de este blog en el fondo donde el pasado se comió el sentido donde nuestras palabras tienen el sello de confidencialidad. La sombra, el aire borroso, el miedo al desnudo, la posición fetal en una esquina sollozando. Y digo:
El sol y la luna que bañan este calendario dicen: es tiempo.
-Abre las compuertas que inundan este valle vacío.
Lo que es muy fácil, solo basta una botella y lo que un arcoíris es a un cuadro a una historia real.
Pero antes muevo la mano efusivo a mis fantasmas. Busco el agua de ojos antes a ver si así me curo de sus espantos.
No! seguiré escarbando las frases que quieren nacer.
Dar a luz teclazos es una burla al concepto. Pero hasta a las burlas bien formuladas se le respeta.
Y aunque sea un satélite, un cadenero, apenas la cimbra que estabiliza la montaña rusa en la que se monta la verdadera heroína, aunque menos que eso, pero soy.